A partir del levantamiento de veda por toxinas moluscos bivalvos, se está trabajando en conjunto con los pescadores artesanales de Almanza, con el fin de dinamizar la operatoria en el despacho de mejillones y cholgas.
El director de Pesca Artesanal, Ernesto López dio precisiones sobre el procedimiento llevado a cabo y detalló que “nos estamos trasladando hasta Puerto Almanza para realizar los muestreos de rutina, llegando a seis puntos de muestreo, de los cuales tres corresponden a Punta Paraná, bahía Cambaceres y paso Guaraní, accediendo a ellos por vía terrestre (se trata de muestras tomadas de banco natural); en tanto que las otras tres muestras las obtenemos mediante navegación en la bahía Brown, tomando las muestras desde las balsas flotantes de cultivo”.
En consecuencia, López destacó la “posibilidad de recuperar zonas de extracción mediante el control de trazabilidad de los productos”, ya que por ejemplo el SENASA había caracterizado a Punta Paraná como zona habilitada, pero sin los controles se hacía imposible recolectar estos productos allí con la misma seguridad que en el resto de las áreas.
“Punta Paraná era un sector que SENASA había clasificado como zona productiva de primera línea de calidad, aunque se había abandonado el monitoreo, debido a que momentáneamente no había productores interesados en ese sector, pero potencialmente es un capital que la provincia tiene para desarrollar, por lo tanto, la decisión de esta gestión fue sumar puntos de muestreos que habían caído en desuso, lo cual fue manifestado en una reunión que tuvimos en el mes de junio, donde se convocó a los productores locales; ellos entendieron la propuesta y se sumaron aportando sus embarcaciones, nosotros colaboramos con los gastos de la expedición y nos acompañan en las tomas de muestras” especificó el director de Pesca Artesanal.
Finalmente López valoró que “al tener un monitoreo sostenido, los productores de la zona tienen la certeza de que las pruebas semanales hacen un mejor seguimiento de la marea roja, alguna vez pasó en otros años, que preventivamente se establecía la veda de una zona porque no se tenía el conocimiento o el seguimiento sistemático del fenómeno, ahora se analiza todas las semanas informando a todo el que lo requiera el resultado del análisis”.